La verdad es que ha sido un verano bastante diferente pese a la similitud
con respecto a otros ya que trabajo, salgo por las diferentes fiestas de la
Cuenca Minera y estudio para septiembre.
El verano empezó para mí el 27 de junio tras hacer el examen de Formación
Rítmica y Danza, después del cual le hicimos una fiesta sorpresa de despedida a
Mar (pequeña gran persona que se nos marchaba a Almería) en su casa,
pasándonoslo muy bien y viendo el partido de semifinales de España de la
Eurocopa.
El día 29 me fui para Riotinto para pasar el verano, ya que desde hace 9
años trabajo como socorrista. Este año hemos sido 4 socorristas en el Club
Inglés de Bellavista, por lo que hemos cobrado menos pero también hemos
trabajado menos.
El mes de julio ha sido un mes normalito, disfrutando el día 1 con la
victoria de España en la Eurocopa, trabajando desde el día 2, estudiando desde
mediados del mes, ensayando con la banda de música y saliendo los fines de
semana, destacando la salida a la feria de El Campillo.
El mes de agosto ha sido el más completo, ahí se ha juntado todo a lo
bestia. El primer fin de semana fue la Villa de Nerva, donde nos juntamos la
pandilla y fuimos a echar el rato. Del 6 al 10 estuve yendo a Aracena a una
excavación arqueológica en el castillo: el director del museo de Riotinto me
comentó que había una campaña de excavaciones donde salieron a la luz restos de
casas de época islámica y él iba a ir, así que le dije si podía ir, y así fue;
ha sido una experiencia buenísima, ya que me encanta la arqueología y tenía una
oportunidad a mi alcance para aprender de esta disciplina, y aprendí excavando,
haciendo perfiles, sacando cerámica, huesos de animales… y poniéndome de tierra
hasta los ojos, literalmente.
En plena faena excavatoria |
Panorámica de la excavación |
Mientras por las mañanas iba a Aracena, por las tardes estudiaba y curraba, y haciendo estas últimas cosas llega el evento central del verano, San Roque (la feria de Riotinto), donde me lo pasé de miedo con mi gente, estuve currando y tocaba con la banda de música en las diferentes actuaciones. Una vez pasada la feria, tocaba sumergirme en los estudios muy a fondo ya que septiembre acechaba, aunque también salí por la feria de Nerva (hay que tener un respiro de vez en cuando); y el último fin de semana de agosto quería haber ido a Villalba del Alcor para los toros de cuerda como otros años, pero había que apretar los estudios y me quedé en casa, también porque tenía que trabajar, así que otro año será.
Septiembre comenzó para mí casi en Sevilla, ya que me fui el mismo día 1
porque he tenido 3 exámenes y una entrega de unidades didácticas para la asignatura de las Prácticas. La primera mitad del mes ha sido movidita, tuve
que venir para Riotinto el día 6 para trabajar y volver a Sevilla el 8 porque
me quedaba un examen, aunque hubiese preferido quedarme en Sevilla, pero el
trabajo no lo permitía, y volví el 11 para Riotinto, trayendo de excursión a
dos amigas. Una vez terminado el tiempo de currar, la cosa ha sido esperar los
resultados, siendo 2 aprobadas de las 4 que tenía pendiente.
Y para terminar el verano, nada mejor que un viaje a Madrid con la banda de
música, pero nada de actuaciones, sólo relax (bueno, dejémoslo en viaje de ocio
XD). Salimos el viernes 21 por la tarde y llegamos al hotel tras 7 horas de
viaje y vueltas en rotondas porque el chófer se perdió, y surgió la primera
frase del viaje cuando parábamos para pagar un peaje “venga, irse bajando que ya hemos llegado”; esa primera noche salimos Emmanuel, Abel y yo a
ver cómo de lejos quedaba un centro comercial que habíamos visto y si había
alguna discoteca o pub, pero no había… El sábado fuimos al parque temático de
la Warner, fue una pasada nos pusimos pingueando en algunas atracciones y otras
hacían de centrifugadora, y en la mayoría de las atracciones empezábamos a
liarla (siempre en el buen sentido) hasta tal punto de que en la atracción Lex Luthor pedimos a la encargada que
diera más caña y la noche fue tan buena como el día, en los cuartos o fuera del
hotel bebiendo un poco y hablando. El domingo visitamos el centro de Madrid; entrando
en la ciudad estábamos un poco con el cachondeo del chófer y las rotondas a ver
si se había perdido y tal, y surgió otra gran frase “Abel,
que traigo en la mochila 5 clases de topos para echarlos en el césped del Bernabéu” siguiendo las risas. Bajamos en Plaza de España
y fuimos al Palacio Real, donde surgió la siguiente frase “ahora se abre una ventana y sale el rey para echar un escupitajo” cuando pasábamos por la fachada lateral del mismo,
vimos también la catedral de La Almudena y fuimos dirección Puerta del Sol, nos
hicimos la foto en el famoso Km 0 y fuimos a la Plaza Mayor, y de ahí volvimos
a Plaza de España para regresar a Riotinto.
En el viaje de vuelta íbamos todos reventados, el que podía dormía y el que
no, pues lo intentaba; paramos para almorzar y luego otra vez más y, tras 7
horas de autobús, llegamos a Riotinto.
Bueno, ahí queda el verano 2012 con sus anécdotas y sus cosas.
Hasta otra,
chavales.
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